Ya hemos visto como la computación cuántica emerge como una tecnología revolucionaria con el potencial de transformar el sector sanitario, abriendo nuevas vías para el diagnóstico, tratamiento y análisis de datos médicos. Sin embargo, pese a sus prometedoras capacidades, esta tecnología enfrenta desafíos técnicos y éticos significativos que requieren atención cuidadosa.
En esta ocasión examinamos los principales retos técnicos, como las limitaciones del hardware y la calidad de los datos, así como los aspectos legales relacionados con la protección y seguridad de los datos sensibles en entornos cuánticos. Comprender estos desafíos es clave para aprovechar plenamente el potencial de la computación cuántica, garantizando al mismo tiempo la protección de los derechos de los pacientes y la equidad en el acceso a estos avances tecnológicos.
Desafíos generales
Limitaciones del hardware cuántico y escalabilidad
A pesar de los avances prometedores, la tecnología cuántica enfrenta importantes desafíos técnicos, especialmente en relación con la fragilidad del hardware cuántico1. Los cúbits, que son las unidades básicas de información cuántica, son altamente sensibles al ruido ambiental y sufren de coherencia, lo que limita el tiempo durante el cual pueden mantener la información. La corrección de errores cuánticos es esencial para lograr cálculos fiables, pero aumenta la demanda de recursos y dificulta la construcción de sistemas escalables. Actualmente, los procesadores cuánticos disponibles tienen un número limitado de cúbits y escasa fidelidad en sus operaciones, lo que dificulta su aplicación práctica en problemas biomédicos complejos que requieren una gran capacidad de procesamiento.
Precisión y calidad de datos en salud y riesgos derivados
Otro desafío crítico en la aplicación de tecnologías cuánticas en salud es garantizar la calidad, precisión y consistencia de los datos utilizados. La salud es un contexto especialmente sensible donde datos incorrectos o inconsistentes pueden conducir a decisiones médicas erróneas, poniendo en riesgo vidas humanas. Además, la integración de datos heterogéneos provenientes de fuentes diversas requiere metodologías avanzadas de validación para evitar brechas informativas y sesgos que puedan afectar la validez del diagnóstico y tratamiento.
La integración de la computación en niebla (“fog computing”) en el sector salud promete importantes avances en el análisis de datos en tiempo real y la atención al paciente al descentralizar el procesamiento de datos, acercándolo a la fuente. Sin embargo, este cambio introduce desafíos regulatorios, de privacidad y seguridad complejos, que los marcos existentes para sistemas centralizados no abordan adecuadamente. Se debería apostar por directrices, colaboración internacional y alianzas público-privadas, que integren seguridad y privacidad desde el diseño (Jerayman, et. al, 2024)2.
Riesgos de sesgos, discriminación y brechas de información
Los avances tecnológicos también amplifican riesgos sociales y éticos, como la discriminación derivada del mal uso de datos genéticos o médicos. El exceso o mal uso de información puede llevar a la estigmatización de pacientes, dificultar su acceso a servicios o generar desigualdades. La transparencia y el control sobre el uso de los datos son fundamentales para evitar que la innovación cuántica en salud reproduzca o amplifique estos sesgos, garantizando un acceso equitativo y justo a sus beneficios.
A grosso modo se podrían clasificar los desafíos en la cuántica aplicada a salud en los siguientes grupos (Jeyaraman et. al, 2024):
Aspectos regulatorios y legales
Protección de datos personales en contexto cuántico
El tratamiento de datos de salud mediante tecnologías cuánticas plantea nuevos retos para la protección de la privacidad y confidencialidad. La criptografía cuántica ofrece soluciones robustas para la seguridad informática, pero la inmensa cantidad de datos manejados requiere de marcos regulatorios que aseguren el cumplimiento de los derechos fundamentales y la minimización de riesgos de filtración o acceso no autorizado.
Legislación y regulación para tecnologías emergentes en salud
El marco legal aún está en desarrollo para adaptarse a las particularidades de tecnologías disruptivas como la computación cuántica. Se requieren normativas flexibles pero rigurosas que garanticen la seguridad jurídica, promuevan la innovación responsable y definan claramente las responsabilidades de los agentes involucrados, desde investigadores hasta proveedores de tecnología y usuarios finales.
Responsabilidades y seguridad en sistemas cuánticos de salud
La implementación de sistemas cuánticos en salud implica responsabilidades legales y éticas en relación con la seguridad, integridad y rendición de cuentas. Los errores en el procesamiento de datos o fallos en la seguridad pueden tener consecuencias graves para pacientes y profesionales. Por ello, es esencial establecer protocolos de auditoría (vid. art. 62 AIA Act), cumplimiento y supervisión humana que garanticen la confianza en estas tecnologías.
La responsabilidad profesional en el ámbito sanitario está regulada principalmente por el artículo 1902 del Código Civil, que establece la obligación de reparar el daño causado por actos u omisiones indebidas. Así por ejemplo, el uso de la inteligencia artificial en la asistencia clínica no exime a los profesionales sanitarios ni a los fabricantes del software de sus responsabilidades legales (“responsabilidad compartida”)3. Además, la nueva normativa sobre responsabilidad por daños causados por productos defectuosos contempla que los sesgos algorítmicos podrían ser considerados como un “defecto del producto”, generando un daño resarcible. Esta responsabilidad abarcaría a los programadores, a los datos de entrenamiento y a los procesos de aprendizaje automático involucrados en el desarrollo del producto.
No obstante, es esencial establecer marcos regulatorios sectoriales (en salud), alianzas estratégicas, observatorios, libro blanco sobre la ética cuántica, etc. que aseguren seguridad, privacidad y rendición de cuentas, fomentando una innovación ética y socialmente responsable en salud.
Para concluir, es evidente que, aunque las tecnologías cuánticas presentan un enorme potencial para revolucionar el sector salud, aún deben superar numerosos desafíos técnicos y regulatorios. La transición hacia su plena integración en la medicina requerirá esfuerzos conjuntos para garantizar la seguridad, precisión y equidad en el uso de estos avances, asegurando que sus beneficios lleguen a toda la población sin comprometer la privacidad ni los derechos fundamentales.
Bibliografía
Chow JCL. Quantum Computing in Medicine. Med Sci (Basel). 2024 Nov 17;12(4):67. doi: 10.3390/medsci12040067. PMID: 39584917; PMCID: PMC11586987.
Jeyaraman N, Ramasubramanian S, Yadav S, Balaji S, Muthu S, Jeyaraman M. Regulatory Challenges and Frameworks for Fog Computing in Healthcare. Cureus. 2024 Aug 13;16(8):e66779. doi: 10.7759/cureus.66779. PMID: 39268273; PMCID: PMC11392028.
Por ejemplo, el Reglamento europeo de IA refuerza esta idea al introducir la figura de la «responsabilidad compartida», que implica que todas las decisiones clínicas asistidas por IA deben contar con trazabilidad y documentación detallada, según lo dispuesto en su artículo 16. Esto garantiza que, frente a posibles errores o daños, tanto el profesional como el desarrollador de la tecnología puedan ser identificados y responsabilizados, promoviendo así un uso seguro, transparente y ético de la IA en el sector salud.Ahora bien, ¿cómo se aplicaría a la salud cuántica? En salud cuántica, esta regulación sería aplicable adaptando estos principios a la tecnología cuántica, donde tanto los desarrolladores de sistemas cuánticos médicos como los profesionales sanitarios tendrían obligaciones de documentación, trazabilidad y supervisión para garantizar la seguridad y responsabilidad en el uso clínico. La incorporación de la trazabilidad en sistemas cuánticos permite identificar la fuente de decisiones o errores, facilitando la atribución precisa de responsabilidades y fomentando la confianza en estos sistemas innovadores. Así, el marco del Reglamento europeo sirve como base para aplicar la responsabilidad compartida y asegurar un uso ético, seguro y transparente de la salud cuántica, con estrictos controles previos y posteriores a la comercialización.
Parlamento Europeo y Consejo de la Unión Europea. (2024). Directiva (UE) 2024/2853 sobre responsabilidad por los daños causados por productos defectuosos (DOUE L 317/2024). https://eur-lex.europa.eu/legal-content/ES/TXT/?uri=CELEX%3A32024L2853




