En varios hospitales públicos de la Comunidad de Madrid se ha incorporado una herramienta digital pionera destinada a mejorar la experiencia de los menores que reciben tratamiento con hormona del crecimiento. Uno de los centros que lidera este proyecto es el Hospital Universitario de Getafe, donde su Servicio de Farmacia Hospitalaria ha asumido la coordinación del desarrollo e implantación de esta iniciativa.
El tratamiento con hormona del crecimiento es esencial para muchos menores con trastornos del desarrollo, pero implica una rutina exigente: inyecciones subcutáneas diarias, que deben administrarse en casa y que, a menudo, generan ansiedad, inseguridad o dudas tanto en los niños como en sus familias.
En respuesta a esta realidad, el equipo de farmacia del Hospital de Getafe ha coordinado el diseño y puesta en marcha de Fharmaverso, una aplicación móvil interactiva y educativa que transforma esta experiencia clínica en un entorno más cercano, didáctico y motivador.
Una academia de superhéroes para aprender y ganar confianza
Fharmaverso está dirigida a niños de entre 6 y 12 años, un grupo que ya es capaz de leer y comprender instrucciones, pero que todavía necesita acompañamiento emocional constante. A través de una plataforma digital gamificada, los pacientes acceden a un universo lúdico donde se convierten en protagonistas de una aventura. Un avatar guiado por un robot divertido y un superhéroe amigo los acompaña en su misión: obtener el «superpoder de crecer».
“La idea es reforzar el conocimiento sobre el tratamiento, los hábitos saludables y la comprensión de la enfermedad, todo desde un entorno amable y entretenido”, explica Rocío Vázquez Sánchez, especialista en farmacia hospitalaria del Hospital Universitario de Getafe y coordinadora del proyecto.
La plataforma, financiada con fondos europeos, permite registrar la administración de las inyecciones y cómo se sienten los menores durante el proceso. Esta información ayuda a los sanitarios a detectar problemas, reforzar la adherencia y personalizar el seguimiento.
“A menudo, los niños y sus familias nos trasladan que, al llegar a casa, surgen dudas: si lo han hecho bien, si han cargado correctamente el dispositivo, si ha entrado toda la medicación… Fharmaverso pretende mitigar esa sensación de incertidumbre, reforzando desde casa lo aprendido en consulta”, cuenta Rocío Vázquez.
Del hospital al hogar: una nueva forma de acompañar al paciente
El proyecto se ha implantado en tres hospitales madrileños: Getafe, Ramón y Cajal y Fuenlabrada. En el caso del Hospital de Getafe, el liderazgo ha sido clave no solo en la coordinación clínica, sino también en la detección de necesidades reales de los pacientes, lo que ha permitido orientar la herramienta con un enfoque práctico y humanizado.
“Los pacientes pediátricos acuden periódicamente al hospital a recoger su medicación. Ese contacto continuo nos permite identificar los obstáculos que enfrentan y dar respuestas desde el ámbito tecnológico y asistencial”, apunta Vázquez.
Una de las ventajas más valoradas por las familias es que la plataforma no sustituye, sino que refuerza la información recibida en consulta. Además, evita visitas innecesarias al hospital al resolver dudas de manejo y mejora la autonomía tanto del menor como de sus cuidadores.
Aunque en esta fase inicial no se ha incluido un chatbot, está previsto integrarlo en versiones futuras. “La mayoría de las preguntas frecuentes ya están cubiertas en el contenido interactivo, pero el contacto directo sería un siguiente paso si logramos financiación adicional”, añade la coordinadora.
Un modelo escalable a otras patologías y comunidades
La vocación del proyecto es clara: extenderse a otros hospitales, comunidades autónomas y patologías crónicas que impliquen tratamientos domiciliarios complejos, tanto en población infantil como adulta. Ya se han iniciado contactos con el Hospital Infantil Niño Jesús para sumarse a la iniciativa en su fase de validación y evaluación de impacto.
Entre las patologías que podrían beneficiarse de esta herramienta están la diabetes, el asma infantil o tratamientos inmunológicos, así como enfermedades raras o crónicas que requieren terapias inyectables regulares.
“Nos gustaría que Fharmaverso creciera hasta convertirse en un universo de acompañamiento digital para pacientes de todas las edades y patologías. Que cada persona, al entrar, encuentre su espacio, su guía, su historia. No solo se trata de mejorar la técnica del tratamiento, sino de cuidar el aspecto emocional y educativo del paciente”, subraya Vázquez.
Desde el Servicio de Farmacia Hospitalaria del Hospital de Getafe, destacan el valor de trabajar en red con otros servicios, como Pediatría y Enfermería, para asegurar el éxito del proyecto y evaluar su impacto real en la mejora de resultados clínicos, calidad de vida y eficiencia del sistema.
“La farmacia hospitalaria no solo dispensa medicamentos, sino que estamos en contacto directo con los pacientes, en el centro de la innovación asistencial, y con la capacidad de transformar su experiencia con herramientas digitales como esta”, concluye la experta.



