La Hospitalización a Domicilio (HaD) es una modalidad asistencial que proporciona tratamiento activo, por parte de profesionales sanitarios, en el hogar del paciente durante un tiempo limitado, para una condición que, de otra manera, requeriría atención en el hospital. Los servicios de HaD tienen dos objetivos: evitar el ingreso hospitalario, y posibilitar un alta precoz. Para ambos objetivos es fundamental la estrecha vinculación del paciente con el hospital y el personal sanitario, prescindiendo de la cama hospitalaria.

Las ventajas de la hospitalización a domicilio para el paciente y su entorno son innegables, pues alivia la ansiedad que el hospital genera, libera a los familiares de la carga de desplazamientos y noches de cuidados, y se evitan complicaciones nosocomiales como infecciones, desorientación, etcétera.

En los centros asistenciales también se perciben importantes ventajas ya que se alivia la elevada presión asistencial, mejorando la gestión de estancias hospitalarias, mejora la comunicación entre niveles asistenciales (Atención Primaria – Atención Especializada), reduce los costes entre un 40 y 60 por ciento con respecto a la hospitalización convencional, pero además favorece una mayor integración entre el paciente, su familia y el personal sanitario.

El tipo de pacientes tratados en los servicios de HaD se encuadra dentro de alguna de las modalidades mencionadas anteriormente, y está condicionado por el entorno social del paciente, la disponibilidad de recursos humanos especializados asignados y el acceso a la tecnología.

Conforme se dispone de más recursos, tanto humanos como tecnológicos, los pacientes con patología aguda se han ido incorporando a este tipo de atención. Así la patología infecciosa, neumonías, endocarditis, celulitis, agudizaciones de la EPOC, o de la insuficiencia cardíaca, la tromboembólica venosa, diabetes descompensada, y pacientes traumatológicos o quirúrgicos complicados, cuyos problemas postoperatorios pueden acabar de resolverse con este tipo de asistencia.

Los procedimientos terapéuticos a implementar en el domicilio son múltiples, desde la oxigenoterapia y la utilización de nebulizadores, para los pacientes con insuficiencia respiratoria, continuando por las infusiones de antibióticos, de prostaglandinas, hasta las transfusiones de sangre, quimioterapia o nutrición parenteral. Asimismo, se pueden realizar procedimientos diagnósticos, como analíticas, paracentesis, totracocentesis, pulsioximetrías, ECG, … Sin duda, entre otros, los factores clave son una adecuada selección de los pacientes tributarios a HAD y disponer de un equipo experimentado en atención de casos complejos en el domicilio.

Pero el mapa de la HaD en España es muy variable en cuanto a carga asistencial asignada, los recursos físicos y humanos con los que cuentan, las estrategias diseñadas, los programas que abarcan y las especialidades a las que prestan apoyo. Este escenario fue analizado por los expertos nacionales, y se generó el documento Proyecto HAD 2020, a través del cual realizó un profundo análisis del estado de la HaD y del cual quedó expuesto un objetivo claro: lograr la homogeneización de la HaD a través de un modelo común y “disponer de sistemas de información para los programas de hospitalización a domicilio que permitan gestionar la información, emprender acciones de mejora y realizar análisis comparativos con otros programas.”

Estos objetivos se alinean con la necesidad de optimizar los procesos asistenciales, manteniendo la calidad del sistema sanitario contribuyendo con la sostenibilidad del mismo. La HaD representa una alternativa de calidad al aumento en la presión asistencial debido al envejecimiento poblacional, a la cronicidad y al aumento de pacientes pluripatológicos.

“Las ventajas de la hospitalización a domicilio para el paciente y su entorno son innegables”

En 2018 se hablaba, en tiempo condicional, respecto del empuje que la telemedicina y las nuevas tecnologías podrían dar al desarrollo definitivo y consolidación de las HaD en España. Ese futuro ya está aquí…

Gracias a las cada vez más expandidas tecnologías de la información, a la importancia que da la ingeniería biomédica al desarrollo de procedimientos diagnósticos o terapéuticos no invasivos o mínimamente invasivos y a la miniaturización de la tecnología, es posible contar con equipos portátiles destinados al paciente y realizar un seguimiento exhaustivo del paciente en domicilio.

La característica que determinará la nueva relación hospital-paciente es la monitorización continua, no invasiva en el hogar, que incluye también la tele-presencia para facilitar la comunicación con el paciente y su entorno, un mejor control y por lo tanto, mayor seguridad sobre esta modalidad de hospitalización. El hospital instala una estación de trabajo en sus dependencias, a través de la que tiene acceso a la información que está siendo recogida en todos y cada uno de los pacientes asistidos. En esta pantalla de visualización se muestran, de forma simultánea, los datos que recoge el equipo de monitorización instalado en el domicilio del paciente, los datos que recibe de otros dispositivos a través de comunicación bluetooth o wifi. Además de la visualización de valores y curvas de tendencias, se muestran cada uno de los eventos o alarmas que se producen. Muchas de estas soluciones incorporan indicadores de criticidad, basados en algoritmos predictivos, que van analizando la evolución del paciente, posibilitando una atención precoz y consecuencias menos desfavorables. Asimismo, se ofrecen dispositivos smartphones o tablets para el personal sanitario, con los pacientes asignados en cada caso, que reciben exactamente la misma información de los equipos de monitorización que recoge la estación de trabajo, de forma que, en cualquier momento, en cualquier lugar, se pueda tener acceso a la información para valorar el estado general del paciente.

Es la innovación tecnológica y su articulación con la realidad la que permite satisfacer las necesidades que se presentan en la actualidad, la que provee de herramientas para cambiar la modalidad asistencial. La HaD cuenta, como nunca antes, con soluciones seguras que permiten aumentar su contribución al conjunto asistencial sanitario, ganando peso específico y pudiendo elevar la complejidad de los tipos de pacientes que son candidatos a la HaD y reduciendo significativamente los ingresos, re-ingresos o estadías prolongadas en el hospital.

Dotar de presupuesto a la HaD es el paso fundamental para hacer uso de estas solucionen es. La inversión se justifica si al valor de este modelo asistencial se contempla:

  • la estimación de ahorro de los programas de HaD (según el informe HAD 2020 puede resultar hasta un 80 por ciento menos costoso en comparación con el mismo tratamiento realizado en régimen de internamiento),
  • la optimización de recursos técnicos y estructurales, la reducción de estancias medias de hospitalización en domicilio antes de obtener el alta (en más de un día),
  • el menor uso de pruebas de laboratorio y exploraciones diagnósticas y
  • el número de estancias hospitalarias evitadas.
  • volcar los datos al sistema de gestión hospitalaria aumentando el flujo de información y priorizando su organización para su mejor gestión.

Fuentes

Proyecto HAD 2020

Informe AQUAS 2018

Informe anual Sistema Nacional de Salud 2016

Informe Anual del Sistema Nacional de Salud 2017

Sociedad Española de Hospitalización a Domicilio