“Estoy muy orgullosa de lo que hemos conseguido en la primera ola de la pandemia”

La Jefa de Servicio de Farmacia del Hospital de Cruces ha hecho un balance de su labor durante estos cinco años que lleva ocupando el cargo. Mónike de Miguel también ha detallado las líneas estratégicas que siguen para ser un Servicio de calidad y cómo mejorar la atención farmacéutica. Además, ha explicado la situación a la que se ha tenido que enfrentar su Hospital y en especial el Servicio de Farmacia durante la pandemia.

¿Qué balance hace de su labor como jefa del Servicio de Farmacia del Hospital Universitario de Cruces?

Es un privilegio formar parte para mí de este equipo llamado Hospital Universitario Cruces, eso en general y en particular en el Servicio de Farmacia. Aunque no todo ha sido maravillo, llevo cinco años de luces y sombras. Pero, en resumen, yo diría que está siendo, un viaje muy emocionante, muy intenso y sobre el cual estoy acompañada de personas maravillosas, grandes profesionales que tienen una gran motivación y muchas ganas de aportar.

¿De cuántas personas se compone su equipo?

En el Servicio de Farmacia seremos cerca de 70 personas. De esas 70 personas farmacéuticos especialistas en farmacia hospitalaria somos 15. Luego también hay 2 de Atención Primaria y un farmacéutico que se dedica ensayos clínicos y que depende del Instituto.

La jefa anterior, la doctora Figuero, ya impulsó y puso la semilla de cómo teníamos que organizarnos, lo nombramos referentes de áreas. En oncología hay uno, en pediatría otro referente, en urgencias…ojalá pudiese haber uno para cada especialidad. Los servicios clínicos saben a quién se tienen que dirigir, sea para lo que sea.

¿Habéis tenido desabastecimiento con tema del COVID?

Hemos tenido problemas de suministro. Aun así, estoy muy orgullosa de lo que hemos conseguido en la primera ola de la pandemia. Antes el tema de los desabastecimientos era algo anecdótico que pasaba en alguna ocasión. Ahora se ha transformado en nuestro día a día. Solo hay que entrar en la página de la AEMPS y ver el listado de medicamentos que tienen problemas de suministro. Eso antes de la era COVID. En la ola COVID, uno de nuestros grandes éxitos fue no dejar de suministrar medicamentos a ningún paciente. La verdad es que fueron momentos muy tensos. La parte positiva es que tenemos mucha capacidad de trabajar de forma colaborativa y eso en los momentos de crisis es una salvación.

¿A qué retos se enfrenta actualmente?

Además de los retos obvios, los que teníamos antes de la pandemia los mantenemos y ahora encima tenemos más, tenemos que dar respuesta a lo que nos vaya a venir, a los planes de contingencia…. Pero sí que quería señalar, sobre todo dentro de los retos del Servicio de Farmacia uno que me parece importante, y es que en Euskadi se va a iniciar la atención farmacéutica a los centros sociosanitarios. Es un proyecto que lleva ya largo recorrido, antes del COVID. Para nosotros como servicio de farmacia es un reto muy motivante y emocionante. Es importante iniciar y empezar a trabajar en la atención farmacéutica, en los sociosanitarios de nuestra área.

¿Cuáles son sus líneas estratégicas para liderar un Servicio de Farmacia de calidad?

Las líneas estratégicas mantenemos las mismas. Como no puede ser de otra manera, son el asegurar una farmacoterapia eficaz, segura y eficiente.

Luego, en nuestro caso concreto, también el conseguir la continuidad en la asistencia fármaco terapéutica. Llevamos ya muchos años siendo organizados en organizaciones sanitarias integradas. Y luego, también para mí es vital la satisfacción de todos los clientes, no solo los pacientes y del personal del Servicio de Farmacia. Si algo he aprendido es que da igual la calificación que tengas, esto se trata de personas y si ellos no están y no entran desde el principio en el proyecto es que no sale.

La Farmacia Hospitalaria es clave en resultados de salud y en la atención al paciente, ¿Qué sistemas utilizan para obtener estos resultados y hacerlos efectivos en la práctica clínica?

De resultados en salud llevamos hablando muchísimo tiempo y la verdad es que nos está costando, no porque no hayamos hecho el cambio cultural, que a mí me parece muy importante, porque al principio cuando se hablaban de resultados en salud yo creo que no todos entendíamos lo mismo. Y es verdad que la farmacia, los farmacéuticos de hospital tenemos todavía esa esa idea de control, fiscalizar…, pero creo que eso ya lo hemos superado. Ahora todo el mundo entiende que hay unos recursos limitados y que lo mejor es coste-oportunidad, y que los resultados en salud son vitales para mejorar. Yo siempre intento lanzar esa esta idea.

Una vez que tenemos claro qué es lo que queremos, necesitamos unos sistemas de información robustos, que sean fáciles y estén integrados en el día a día de las actividades de los profesionales. Porque si es hacer algo más, cuesta, cuesta mucho. Es verdad, que ahora con VALTERMED la idea es muy buena y potente. Ojalá salga, salga bien y que quede todo lo que es la filosofía de VALTERMED y se lleva a la práctica.

Aquí es verdad que los sistemas de información corporativos también nos permiten el poder hacer ciertos proyectos de medir resultados en salud como en pacientes con VIH o Hepatitis C.

Todas estas grandes maquinarias de manejo de datos tienen que ir por ahí. Todo lo demás pueden ser proyectos muy concretos y limitados en el tiempo. Y luego sobre todo yo creo que es hacer participar a todas las personas implicadas, a todos, y después que haya feedback, o sea, que yo obtenga unos resultados que yo pueda ver qué es lo que hacemos o dejamos de hacer.


¿Cómo cree que se podría mejorar la Atención Farmacéutica?

La atención farmacéutica, es el core, es nuestro core de la farmacia hospitalaria. Para mí es el proceso clave. Lo que tenemos que hacer es seguir buscando, siendo críticos y dar el paso adelante de todo aquello que se puede automatizar o todo aquello que se pueda delegar. Tendremos que hacerlo de forma que sea segura y que nos sintamos todos cómodos. Pero es la única manera de poder sacar el tiempo y los recursos necesarios para hacer la atención farmacéutica que queremos hacer. Porque yo creo que ya lo tenemos muy bien definido en Farmacia Hospitalaria, la atención farmacéutica tiene que ser individualizada. Entonces sí, es individualizada necesitas, tener información primero del paciente, por supuesto. Y luego formar parte del equipo que le atiende. Y no solo en el momento en el que te viene a ti a la consulta o que justo está ingresado en el hospital. Por eso digo que el concepto lo tenemos claro, ahora tenemos que ser valientes; automatizar y delegar.

¿Cuántos ensayos clínicos se están realizando en Cruces? ¿Cuál es vuestra implicación en este ámbito?

Es un problema que tenemos no solo en el Hospital Universitario de Cruces, creo que en Osakidetza. Hay que darle una vuelta potencial porque sin investigar no se crece y el ensayo clínico es fundamental. También es verdad que ha cambiado el ensayo clínico cuantitativamente, hace años el crecimiento era exponencial. Lo que sí que ha aumentado es la complejidad.

¿Os llegan los resultados de los ensayos clínicos?

Nos llegan cuando se publican los ensayos con las publicaciones es cuando no llegan. Sí que es verdad que si ha habido un ensayo clínico en el hospital y el servicio oportuno ha estado involucrado, pues siempre da mayor seguridad y es más fácil saber de qué estamos hablando.

¿En qué punto se encuentra el ensayo clínico internacional del Remdesivir en el que está participando el hospital de cruces?

Va bien, hasta ahora es lo que podemos decir. Tenía varias ramas abiertas que se han ido cerrando, de momento va.

También forma parte del grupo asesor de Mapex, (mapa estratégico de Atención Farmacéutica al paciente externo impulsado por la SEFH). ¿En qué ha ayudado este proyecto para que la problemática asistencial en la atención a los pacientes externos sea cada vez menor?

Yo fui asesora de los inicios de Mapex, luego ha habido ahí mucha gente trabajando muy duro. Yo, antes de ser jefe de servicio, fui la responsable de la unidad de pacientes externos. Entonces, creo que es un ejemplo claro de la farmacia hospitalaria. Las unidades de pacientes externos enseguida entendimos que no nos podíamos dedicar solo a validar o a estar atentos de los medicamentos que nosotros dispensábamos, que lo que teníamos que hacer era una validación y una atención farmacéutica, teniendo en cuenta al paciente de forma global. Así lo hicimos, pero es difícil tener unas herramientas. Nosotros hemos tenido ventajas porque es verdad que la historia clínica única y el poder ver desde lo distintos niveles de asistencia toda la información, pues ha facilitado. Pero luego, además, es que veíamos que tampoco podíamos agrupar a los pacientes porque estaban en tratamiento con un medicamento, o que tampoco podíamos agrupar a los pacientes por padecer una enfermedad, sino que buscábamos una atención farmacéutica individualizada. El objetivo de Mapex era el poder marcar unas líneas estratégicas para que luego los servicios de farmacia pudiésemos ir adecuándolas a nuestro día a día. Por eso hablábamos de estratificación en un principio y después llevar a cabo la atención farmacéutica que corresponda y necesita cada paciente.

¿Cuándo cree que el farmacéutico de hospital se podrá integrar en el equipo asistencial?

Creo que las cosas importantes no pueden hacerse de la noche a la mañana. Llevamos mucho tiempo formándonos, nos hemos formado haciendo cambios muy importantes en los servicios de farmacia. Cuando tuve mi primer contacto con la farmacia hospitalaria estaba orientada al medicamento, y hemos sido capaces, en un tiempo relativamente corto, de orientarnos al paciente en todas nuestras actividades, hasta las clásicas como la logística. Todo lo hemos llevado y lo hemos orientado a la mejor atención y a mejorar la calidad de vida y la salud de pacientes. Ahora estamos dando el paso a los equipos. Tendremos que delegar determinadas actividades que realizamos ahora y automatizar todo lo que podamos para poder estar en el sitio preciso donde más aportemos.

¿Qué función desempeña la farmacia hospitalaria en la evaluación y selección de medicamentos en los Comités FCT de las CCAA?

Históricamente la farmacia hospitalaria, los farmacéuticos hospitalarios han liderado los comités de farmacia terapéutica de los hospitales. Es verdad que ahora más que de los hospitales se habla de las comunidades autónomas. Y si hablamos de la mía concretamente, yo he nacido profesionalmente con una comisión corporativa de farmacia y con compras centralizadas así que es nuestro día a día y lo vivimos con total, con total normalidad. Además, es que el grupo Génesis de la SEFH, por ejemplo, creo que es nuestra mejor carta de presentación, está más que demostrado que ese es nuestro sitio.

¿Cómo se ha adaptado la Farmacia Hospitalaria a la nueva situación que ha provocado la crisis del coronavirus?

No me puedo sentir más orgullosa de pertenecer a Farmacia Hospitalaria, se ha demostrado que tiene una capacidad de adaptación fabulosa, ya no solo en hacer lo que fuera por poder cubrir las necesidades de todos los pacientes, incluso del resto de personal, de profesionales sanitarios. Intentando, pues eso con nuestra actividad, facilitar todo lo posible en cuanto a todo aquello que tenía que ver con el medicamento, intentar facilitarlo. Y luego tenemos esta forma de trabajar muy colaborativa que nos hace muy grandes: a la hora de recoger datos, a la hora de la SEFH de organizar el fondo solidario, a la hora de las buenas prácticas de un servicio y poder contarlas y compartirlas con el resto.

¿Cree que la pandemia actual va a suponer una potenciación del funcionamiento del sistema de telefarmacia?

La telefarmacia o la atención farmacéutica no presencial es algo de lo que llevamos hablando muchísimos años. De hecho, nosotros aquí en nuestro servicio de farmacia llevamos con un proyecto al que llamamos Tikafarm hace ya muchísimos años y consistía en eso, en atención farmacéutica no presencial y entrega a domicilio del medicamento. Lo que pasa es que ha llegado la pandemia y ha habido una necesidad, el objetivo era que nadie se quedara sin su medicamento. Todos lo hemos hecho, cada uno como ha podido e igual sin mucho procedimiento porque aún no está creado uno específico.

Yo creo que ahora ya la telemedicina, incluida la telefarmacia tiene que estar sí o sí, pero hay que definir cómo tiene que ser el modelo. Nosotros llevamos aquí mucho tiempo con carpeta salud y demás, pero sí que ha costado. Yo creo que esto al final, y se ha visto también por los pacientes que es una manera en la que se puede trabajar y que puede ser añadido a la a la atención habitual presencial.