«ASISA es hoy una compañía más sólida que hace un año»

Licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad Complutense de Madrid y especialista en Traumatología y Cirugía Ortopédica, Enrique de Porres comenzó su actividad profesional como traumatólogo de la Seguridad Social. En 1989 fue nombrado adjunto al presidente de LAVINIA-ASISA y poco después patrono de la Fundación Espriu. Desde 2003 ocupa el cargo de consejero delegado de LAVINIA-ASISA. En esta entrevista para New Medical Economics ha explicado la evolución del sector de las aseguradoras sanitarias, lo que ha hecho el Grupo ASISA para hacer frente a la pandemia provocada por el COVID-19 y sus objetivos prioritarios dentro del Plan Estratégico de ASISA.

Lleva más de 30 años en de ASISA, ¿cómo ha evolucionado el sector de las aseguradoras sanitarias en los últimos años?

ASISA celebra este año el 50º aniversario desde su fundación en 1971. En este tiempo, el sistema sanitario español ha cambiado profundamente y ha evolucionado hasta convertirse en uno de los más modernos y eficaces del mundo. Esta evolución ha sido posible por el desarrollo del sistema sanitario público combinado con el fortalecimiento de un sector privado muy dinámico, que, liderado por el seguro de salud, ha apostado por la excelencia, la tecnología y la calidad y que atiende a prácticamente a un tercio de los ciudadanos. En ese tiempo, las aseguradoras de salud se han convertido en la principal puerta de entrada a una sanidad privada de gran calidad y que practica una medicina avanzada.

Desde su nacimiento, ASISA ha desarrollado un modelo propio como empresa de la economía social de mercado, sin ánimo de lucro, que reinvierte sus beneficios en una mejora de la calidad asistencial y en la formación de sus profesionales y que sitúa al asegurado en el centro de sus acciones. Nuestro reto es seguir creciendo y desarrollando nuestra red asistencial propia y dotarla de la tecnología más moderna que nos permita realizar una medicina de calidad cada vez más personalizada y eficiente.

¿En qué punto se encuentra el mercado asegurador actualmente? ¿Cuáles son los grandes retos?

El seguro de salud mantiene una gran fortaleza: en 2020 volvió a ser uno de los ramos con mejor comportamiento del sector y los primeros meses de 2021 han sido positivos. Los asegurados valoran muy bien el servicio que reciben y cada vez más empresas lo incluyen en sus planes de retribución flexible. A esto se une que la pandemia ha provocado un aumento de la preocupación de los ciudadanos por el cuidado de su salud y el seguro ha mostrado la capacidad de atenderles incluso en la emergencia sanitaria más compleja a la que nos hemos enfrentado en décadas. Por lo tanto, a corto y medio plazo el ramo tiene potencial para seguir creciendo a un ritmo que dependerá de la rapidez de la recuperación económica una vez que se extienda la vacunación.
Sin embargo, el ramo tiene algunos retos que debe afrontar a medio plazo. El más importante, el incremento de costes por la concentración de la oferta hospitalaria, la introducción de innovación y tecnología, y las consecuencias que ha generado la propia pandemia. En este sentido, aunque la pandemia ha provocado una reducción coyuntural de la siniestralidad durante el confinamiento, estamos asistiendo a un incremento muy importante de la demanda asistencial para recuperar la demora en los tratamientos que provocó el confinamiento, con el consecuente retraso en diagnósticos y agravamiento de patologías, y las propias secuelas de la COVID-19.

Además, debemos iniciar una reflexión sobre la necesidad de incrementar la duración de los contratos del seguro de salud más allá de un año, con el objetivo de trabajar la prevención a medio y largo plazo con nuestros asegurados. El envejecimiento de la población lleva consigo la aparición en el individuo de lo que denominamos pluripatología (más de una enfermedad) y a la cronicidad de la mayor parte de esas patologías, que precisan de un abordaje preventivo y predictivo a más largo plazo, para prolongar el estado de salud cuanto más tiempo mejor. Asociado a este problema del envejecimiento aparece otro factor limitante de la evolución del sector, porque la técnica de tarificación del riesgo en los contratos individuales debe evaluar el riesgo de enfermar para poner el precio de la prima y, evidentemente, el riesgo es mucho mayor a mayor edad. Este hecho se traduce en la dificultad de acceder a este sector cuando más se necesitaría estar cubierto, ituación que se agrava cuando se deja de estar en activo y la capacidad económica depende de la cuantía de una pensión. Debemos avanzar hacia otro modelo basado en la introducción de planes a largo plazo que permitan aportar más cuando se es más joven para tener que aportar menos al aumentar la edad.

En el momento que estamos viviendo es imposible no hacer referencia a la pandemia provocada por el COVID y sus consecuencias en todas las actividades: ¿Qué ha hecho el Grupo ASISA para hacer frente a la pandemia provocada por la COVID-19?

La pandemia de la COVID-19 ha afectado de manera muy notable a nuestra actividad y creo que ASISA, como el resto del sector, ha reaccionado con responsabilidad y eficacia. En resumen, desde un punto de vista asistencial, ASISA ha querido contribuir desde el inicio de la emergencia a mitigar sus efectos y ha atendido a sus asegurados afectados por la epidemia, renunciando a aplicar las cláusulas de los condicionados que excluyen la prestación en caso de epidemia. Desde el inicio de la pandemia, hemos atendido a más de 100.000 pacientes por COVID-19 en nuestra red asistencial, muchos de ellos derivados por la sanidad pública, y hemos gestionado el ingreso hospitalario de más de 6.500 asegurados, tanto en centros propios como concertados. Para atender a estos pacientes, el Grupo HLA ha invertido más de 15 millones de euros que han permitido reorganizar sus centros y ampliar las unidades de cuidados intensivos y las plazas de hospitalización, además de reforzar sus plantillas en las unidades con mayor presión asistencial. Además, hemos prestado asistencia domiciliaria por COVID-19 a más de 65.000 asegurados.

Por otro lado, hemos reforzado nuestros canales de atención al cliente y hemos potenciado los servicios de telemedicina: Asisa LIVE ha atendido más de 30.000 video consultas en más de 30 especialidades y el Chat Médico, la app que permite contactar 24 horas con médicos especialistas, recibió durante los meses más críticos de la pandemia más de 65.000 consultas.

¿Qué han aprendido de esta crisis sanitaria mundial?

Toda crisis es una oportunidad para aprender y ampliar horizontes. A nivel empresarial, una vez que empezamos a ver el final de la pandemia gracias a la vacunación, estamos empezando también a extraer conclusiones y abriendo una reflexión sobre los aciertos y los errores que hemos cometido en nuestra gestión interna y cómo solventarlos. Por ejemplo, estamos reflexionando sobre cómo perfeccionar nuestra relación con los mercados internacionales de material sanitario, un ámbito en el que tenemos algunas carencias y que se ha demostrado esencial. O cómo perfeccionar nuestros sistemas de alerta temprana para adelantarnos en escenarios similares.

Otra lección que nos deja esta crisis es la importancia de la colaboración público-privada y la necesidad de establecer nuevos mecanismos de trabajo conjunto. La emergencia sanitaria ha mostrado con toda su crudeza la limitación de los recursos disponibles y la necesidad de contar con mejores herramientas de cooperación y coordinación que movilicen íntegramente todos esos recursos, sin importar si son públicos o privados.

¿Qué nos puede contar de la iniciativa de atención domiciliaria a asegurados afectados por COVID-19?

Durante los meses más complicados de la pandemia, ASISA desarrolló un sistema de seguimiento telefónico de los asegurados infectados por COVID-19 y que o bien permanecían en aislamiento domiciliario mientras esperaban el alta definitiva tras haber estado ingresados en un hospital o bien se encontraban en seguimiento médico para prevenir su ingreso hospitalario. ASISA es la única aseguradora que ha desarrollado un proyecto propio de estas características para el seguimiento de sus asegurados.

El objetivo de este programa es vigilar la evolución de los pacientes en sus domicilios de forma segura, garantizando la continuidad asistencial y siguiendo en todo momento las pautas y procedimientos establecidos por las autoridades sanitarias. Para ello, ASISA desarrolló un protocolo propio basado en las recomendaciones del Ministerio de Sanidad y de las diferentes sociedades científicas.

Los resultados que hemos obtenido con este proyecto son muy positivos y nos permitirán, una vez superada la emergencia provocada por la COVID-19, aprovechar esta experiencia para mejorar la atención domiciliaria a pacientes con diferentes patologías.

¿A cuántos pacientes ha atendido el Grupo HLA durante la pandemia? ¿Cómo ha sido su colaboración con la sanidad pública en este sentido?

La sanidad privada ha estado a disposición de las autoridades sanitarias desde el primer momento y hemos trabajado junto al sector público de manera coordinada y muy efectiva. De hecho, la aportación de la sanidad privada ha sido imprescindible para superar la crisis y salvar miles de vidas. Alrededor del 20% de los afectados por la COVID-19 han sido atendidos en hospitales privados, lo que ha evitado el colapso del sistema sanitario. El Grupo HLA ha atendido a más de 100.000 pacientes por COVID-19, muchos derivados de la sanidad pública, y buena parte de ellos requirieron ingresos y cuidados intensivos. Además, las aseguradoras de salud hemos dado cobertura a todos los asegurados que la han necesitado. Por lo tanto, la sanidad privada en su conjunto ha estado a la altura del desafío y su contribución ha sido esencial para frenar la pandemia e impulsar la progresiva vuelta a la normalidad del sistema sanitario.

¿Cómo lograron garantizar la seguridad de los pacientes y de todos los profesionales implicados?

Garantizar la seguridad de nuestros pacientes y profesionales ha sido nuestra gran obsesión a lo largo de estos meses. El inicio de la emergencia fue realmente complicado de gestionar. Como el resto del sistema sanitario español, carecíamos de una reserva estratégica de material de protección y tuvimos grandes dificultades para acceder a los mercados internacionales. Superada esa etapa con un gran esfuerzo logístico y con la implicación y el compromiso de todos los profesionales del Grupo, pudimos establecer un sistema avanzado de protocolos, limpieza, itinerarios y medidas de protección frente a la COVID-19 para garantizar la seguridad en todos nuestros centros. De hecho, la red asistencial del Grupo ASISA fue la primera del sector que recibió, en junio de 2020, los certificados AENOR que garantizan los estándares de calidad más estrictos para manejar la COVID-19.

Dentro del Plan Estratégico del Grupo Asisa: ¿Cuáles son sus objetivos prioritarios? ¿Podría describir las principales líneas de actuación y su evolución?
ASISA inició hace ya algunos años un proceso de transformación muy profundo que nos ha permitido crecer, consolidar nuestra posición en el seguro de salud, impulsar nuevos proyectos e inversiones y mantener nuestro modelo cooperativo único y diferencial entre las aseguradoras sanitarias. En este sentido, la crisis ha acelerado ese proceso, pero nuestros retos y planes estratégicos no han variado. ASISA seguirá desarrollando su estrategia de diversificación multi ramo, consolidando su cartera de seguros de salud, dental, vida, decesos, accidentes, mascotas o viajes.

En lo que se refiere a las empresas asistenciales, con el Grupo HLA a la cabeza, seguiremos impulsando el plan de modernización de hospitales y centros médicos, con la creación de nuevas unidades especializadas, la incorporación de tecnología de última generación y la formación de sus equipos de profesionales. Además, el Grupo ASISA mantiene su apuesta por el desarrollo de clínicas especializadas en diferentes ámbitos asistenciales (dental, oftalmológico, reproducción asistida, audiología, cuidado integral de la salud, etc.), uno de los elementos diferenciales de su actividad y su apuesta por la excelencia.

Por otro lado, el Grupo ASISA seguirá impulsando su proceso de internacionalización y avanzando en la transformación digital de la compañía para establecer una nueva forma de relación con los clientes.

¿Cuáles han sido las herramientas clave para lograr los crecimientos obtenidos?

ASISA es hoy una compañía mucho más sólida que hace un año. La pandemia nos ha obligado a acelerar nuestra transformación con el fin de ser cada vez más útiles para nuestros clientes. Nuestra organización es más eficiente, contamos con muchas más herramientas, incluida la telemedicina, para atender las demandas de los asegurados y adaptarnos a sus necesidades específicas y hemos seguido avanzando en nuestra apuesta por la sostenibilidad y el cuidado del entorno.

A la vez que afrontamos esa transformación, hemos seguido impulsando nuestro crecimiento, tanto en el ramo de salud y dental como en los nuevos ámbitos de los seguros personales en los que operamos (vida, decesos, mascotas, accidentes y viajes). Para ello, hemos fortalecido nuestra red comercial con la apertura de nuevas oficinas y agencias y la ampliación de nuestros acuerdos de distribución, tanto en el ámbito de la mediación como con otras aseguradoras, grandes distribuidores o banca seguros.

Además, hemos seguido ampliando nuestra red asistencial propia, a la que hemos incorporado un nuevo hospital en Cádiz y nuevas clínicas especializadas y seguimos impulsando un plan de modernización e incorporación de tecnología de última generación y profesionales de alto nivel para llevar a cabo las técnicas de diagnóstico y tratamiento más avanzadas.

El Grupo ASISA cuenta con su propia red asistencial, en continuo proceso de modernización y expansión, y nos gustaría conocer su dimensión.
La red propia es un elemento esencial para entender la configuración y el potencial del Grupo ASISA porque, además de diferenciarnos de nuestra competencia, nos permite garantizar el máximo nivel de calidad asistencial. En 2020, las empresas asistenciales del Grupo ASISA facturaron 461,3 millones de euros, un 6,5% más que en 2019, lo que da una idea de la importancia que tienen para nuestra actividad.

El eje de nuestra red propia es el Grupo HLA, que cuenta con 16 hospitales, 36 centros médicos multi especialidad y 41 unidades de referencia en tratamientos de última generación, lo que le convierte en el mayor grupo hospitalario español propiedad de una aseguradora. En 2020, HLA incorporó a su red asistencial el hospital HLA La Salud en Cádiz y nuevos centros médicos en Almería, Granada o Lérida, donde hemos asumido la gestión de la clínica Bon Àrea. Además, estamos desarrollando un ambicioso plan de remodelación que afecta a varios hospitales y de ampliación de servicios con la creación de nuevas unidades especializadas.

Junto al impulso de nuestra red hospitalaria, el Grupo ASISA apuesta por el desarrollo de clínicas especializadas en diferentes ámbitos asistenciales: dental, oftalmológico, reproducción asistida, audiología, cuidado integral de la salud, diagnóstico por la imagen o análisis clínico. Esta red cuenta ya con casi 100 centros especializados y mantenemos un plan estratégico de desarrollo en cada área para aumentar nuestra presencia en todo el país.
En definitiva, nuestra red asistencial propia y especializada es un elemento clave para el desarrollo del Grupo ASISA, diversificar nuestra actividad, mejorar la rentabilidad de la compañía y garantizar la máxima calidad asistencial a nuestros pacientes y asegurados.


Háblenos del tercer eje estratégico del Grupo ASISA: su proceso de internacionalización.

ASISA ha acumulado una gran experiencia en la gestión sanitaria en España y creemos que podemos exportar nuestra visión de la sanidad y nuestro modelo de actuación a otros países. En este sentido, hemos impulsado un proceso de internacionalización que se basa en la búsqueda de nuevas oportunidades de invertir y crecer en el exterior mediante proyectos que se ajusten a lo que sabemos hacer. Ya tenemos presencia en Portugal, donde ASISA comercializa seguros dentales y seguros de salud y acabamos de abrir nuestra primera clínica, y en Italia, donde opera desde hace algunos años una clínica dental.

Además, trabajamos en Latinoamérica, donde tenemos actividad en Brasil, en el ámbito dental, y en México y Nicaragua con sendas clínicas de reproducción asistida. Otra región en la que estamos presentes es Oriente Próximo, donde hemos impulsado True Smile Works, la primera red dental internacional que se lanza en el mercado de los Emiratos Árabes Unidos (EAU), que ya cuenta con dos clínicas y tiene como objetivo atender a los residentes locales y extranjeros en clínicas de alta calidad.

Por último, en el ámbito tecnológico contamos con una herramienta informática de gestión sanitaria integral, Green Cube, desarrollada íntegramente por la empresa tecnológica del Grupo ASISA, Tich Consulting, y que ya está instalada en hospitales y centros médicos de una docena de países. Seguiremos impulsando esta estrategia de internacionalización porque nos fortalece como grupo sanitario y supone una oportunidad de crecer y adquirir experiencia.

Actualmente el uso de nuevas tecnologías son un aliado fundamental para avanzar y consolidar los procesos de gestión y los canales de comunicación, pero durante 2020 su aceleración ha sido clave: ¿En qué proyectos se encuentra inmerso el Grupo ASISA?

ASISA impulsa en los últimos años un proceso de transformación digital que afecta a todos los ámbitos de la compañía y que tiene como objetivo agilizar y simplificar sus procesos para hacerlos más eficientes y establecer una nueva relación con el cliente, mucho más ágil y directa. Para ello, ASISA desarrolla diferentes proyectos, entre ellos la reorganización de sus sistemas de gestión para aprovechar las ventajas que proporciona la tecnología ‘cloud’; el desarrollo de sus canales de atención digital a los clientes que faciliten los trámites burocráticos; el impulso de sistemas de telemedicina; o el desarrollo de herramientas que permitan ofrecer soluciones personalizadas a nuestros clientes. En este proceso de transformación tecnológica, ASISA utiliza todas las tecnologías disponibles (inteligencia artificial, machine learning, análisis de datos, etc.) con el objetivo de proporcionar inteligencia a todos nuestros procesos y dar respuesta a las necesidades de nuestro negocio.

Durante 2020 hemos acelerado en este proceso de transformación empujados en buena medida por la COVID-19, una crisis que nos ha demostrado la fortaleza de nuestras capacidades en el ámbito tecnológico: en apenas unos días, modificamos nuestra forma de trabajar para hacerlo a distancia (el 90% de la plantilla de ASISA ha estado teletrabajando desde las semanas más duras del confinamiento de marzo y abril de 2020 hasta la finalización del estado de alarma sin que nuestra capacidad de prestación del servicio sufriera ninguna alteración. Seguiremos avanzando en este proceso que debe dar como resultado a medio plazo una compañía más ágil y dinámica y mucho más cercana a nuestros clientes.

Y en el área asistencial, ¿qué uso hacen de ellas para mejorar la salud de los pacientes?

La pandemia ha acelerado la transformación de la atención sanitaria y ha creado un nuevo escenario que, a corto y medio plazo, cambiará algunos hábitos y la propia organización del sistema sanitario: se reforzarán los sistemas de seguimiento domiciliario a través de herramientas de telemedicina y los hospitales se reservarán para urgencias y casos complejos; los pacientes recurrirán a la tecnología para obtener un primer diagnóstico a distancia; y los avances en la medicina personalizada nos permitirán tener mucha más información sobre nuestra salud y relacionarnos de manera diferente con el sistema sanitario.

La telemedicina ha venido para quedarse. La COVID-19 ha acelerado su implantación y en el futuro será una forma más de acceso a la medicina, pero no sustituirá a la consulta presencial; en todo caso, la complementará. ASISA siempre ha defendido que la relación directa y personal entre médico y paciente es indispensable e insustituible para el ejercicio de la medicina y así seguirá siendo. Será además una nueva vía para la formación e información entre los profesionales de nuestros centros y una vía de soporte para aumentar la capacidad diagnóstica de nuestros especialistas que podrán contar en tiempo real con cualquier apoyo externo que puedan necesitar para agilizar la toma de decisiones.

ASISA ha hecho un gran esfuerzo en el último año para avanzar muy deprisa en este ámbito y contamos con un servicio de videconsultas (Asisa LIVE) y con un Chat Médico, una app para dispositivos móviles que permite acceder desde cualquier lugar y en cualquier momento a un profesional médico en las principales especialidades. A corto plazo seguiremos desarrollando estas herramientas, incorporando nuevos servicios y especialidades y estableciendo mecanismos para garantizar la máxima calidad asistencial.

El desarrollo sostenible es la clave de nuestro futuro, ¿cómo se implica el Grupo ASISA en este reto?

El Grupo ASISA basa su visón institucional en el cuidado de las personas, empezando por su salud, y somos muy conscientes de que la salud de las personas depende en gran medida de la calidad ambiental y la sostenibilidad del entorno en el que conviven. Por ello, hemos incorporado a nuestros pilares estratégicos el de la sostenibilidad, a través de una política de responsabilidad social que apuesta por el fomento de hábitos de vida saludable, y de un plan medioambiental que minimiza al máximo las emisiones contaminantes de nuestros centros e impulsa un uso responsable y eficiente de los recursos. Apostamos por una energía verde y una movilidad sostenible: el 99% de la energía eléctrica consumida por la compañía procede de fuentes 100% renovables, hemos sustituido el uso de combustibles fósiles en toda nuestra red asistencial por otros menos contaminantes, como el gas natural, y en nuestra flota de vehículos cada vez tienen más presencia los coches eléctricos e híbridos.

Nuestros patrocinios se orientan siempre a promover y favorecer hábitos de vida saludables y a concienciar a la ciudadanía en la práctica del deporte, en el amor a la cultura y en el conocimiento de la innovación asistencial mediante la divulgación científica sólidamente documentada.