Una medicina basada en lo que hay
Las circunstancias podemos y debemos mejorarlas; pero mientras tanto son las que son, y el momento de dar lo mejor de nosotros mismos es ahora. En el corazón de la profesión médica late una vocación que trasciende las circunstancias y las condiciones adversas. Somos más que meros practicantes de la medicina; somos guardianes de la salud, con un compromiso inquebrantable de brindar lo mejor de nosotros a nuestros pacientes. En este momento crucial, en el epicentro de desafíos y limitaciones, es donde debemos demostrar la verdadera esencia de nuestra dedicación. La vida de un profesional de la salud está intrínsecamente ligada a la atención y el cuidado de aquellos